Valoración de activos, cálculo de deterioro en cuentas contables

La valoración de activos en el balance general de una compañía debe realizarse al menos una vez al año para una correcta planeación financiera. En los casos de compra y venta de la compañía facilita el proceso mantener esta valoración actualizada. Las normas de Información Financiera (NIIF) regulan los criterios y procedimientos para la medición, presentación y revelación de dicho deterioro. 

Cuentas del balance general que requieren valoración de activos 

1. Valoración cuentas por cobrar: se utiliza el modelo de pérdida esperada, el cual se basa en la probabilidad de incumplimiento de los deudores y en la estimación de las pérdidas que podrían derivarse de dichos incumplimientos. 

2. Valoración inventarios: se utiliza el concepto de "Costo Neto de Realización" (CNR), que implica comparar el valor neto de venta del inventario con su costo de producción o adquisición. El menor de los dos valores se toma como referencia para la valoración. 

3. Valoración de activos fijos tangibles: se realiza mediante el cálculo del deterioro, el cual implica comparar el valor en libros del activo con su valor de recuperación. Si el valor en libros es superior al valor de recuperación, se reconoce el deterioro correspondiente. 

Ejemplos 

A continuación, se presentan ejemplos de valoración de activos de acuerdo con las NIIF. 

Propiedad, Planta y Equipo (PPE): terrenos, edificios, maquinaria y equipo, se valoran inicialmente al costo. Posteriormente, se utiliza el modelo del costo o el modelo de revaluación. Este modelo implica mantener el activo al costo menos la depreciación acumulada. El modelo de revaluación permite registrar el activo a su valor razonable, y los cambios se reconocen en el patrimonio neto a una misma fecha. 

Activos Intangibles:  patentes, marcas comerciales y derechos de autor, se valoran al costo. Posteriormente, se utiliza el modelo de revaluación. Este modelo implica mantener el activo al costo menos la amortización acumulada. Activos intangibles, marcas, comerciales, pueden tener un valor indefinido y no se amortizan. 

Inventarios: se valoran al costo o al valor neto de realización, el menor de los dos. El costo puede incluir el costo de adquisición, de producción y otros costos directamente atribuibles para llevar los inventarios a su ubicación y condiciones actuales. El valor neto de realización es el precio de venta estimado menos los costos requeridos para completar la producción y los necesario para hacer la venta. 

Activos Financieros: acciones, bonos y préstamos, se valoran inicialmente al costo. Posteriormente, se pueden utilizar:  

1. Modelo del costo amortizado.  

2. Valor razonable a través de otros resultados integrales (FVOCI). Estos activos FVOCI se valoran a su valor razonable y los cambios se reconocen en otros resultados integrales. 

3. Valor razonable a través de la ganancia o pérdida (FVPL). Los activos FVPL se valoran a su valor razonable y los cambios se reconocen en el estado de resultado. 

4. Modelo del costo amortizado es para los activos financieros que tienen flujos de efectivo contractuales fijos y determinables.  

Conclusión 

La valoración de activos es un requisito fundamental para el cálculo de daño emergente y de deterioro en las cuentas contables. La banca de inversión posee la experiencia y los recursos necesarios para llevar a cabo estas valoraciones, incluyendo un equipo profesional capacitado en temas contables y financieros (conocimientos de las normas NIIF especificas), así como certificaciones internacionales como las emitidas por "International Valuation Standards" (IVS) y el "CFA Institute".

Estas normas proporcionan un respaldo adicional en el cálculo del deterioro, aunque no son de implementación obligatoria en Colombia. Contar con este apoyo permite a las compañías reflejar con precisión el valor de sus activos en los estados financieros.